Krova Vodka, vodka de origen polaco, y elaborado a partir de una cuidadosa mezcla de alcoholes extra neutros, presenta una pequeña evolución en su diseño.
Con el objetivo de tener una mejor visibilidad de su botella en los puntos de venta, manteniendo los estandartes de calidad del producto, Beveland Distillers ha optado para cambiar el color negro del nombre de la marca a un color plata obteniendo así una mejor visualización.